Hemos visto en el día de hoy como el Tesoro español logró salir airoso de la subasta de letras a 12 y 18 meses. En concreto, ha colocado 4.940 millones de euros, más de los 4.250 millones de euros del objetivo previsto. Para poder hacerse con el dinero, tuvo que pagar un 4,05% y un 4,226%, respectivamente.
De esta manera, ha vendido más deuda de la prevista en un principio, y a tipos inferiores a la subasta anterior y con una demanda muy firme.
Si lo vemos por partes, la demanda de las letras a 18 meses, que han pagado un 4,226% de tipo medio, se ha situado en 7.452,5 millones. La rentabilidad de las que vencen en 12 meses ha quedado en el 4,050%, con una demanda del 10.811 millones de euros. En total, la demanda ha alcanzado los 18.263 millones.
Los especialistas hacen hincapié en que el haber colocado más dinero del inicialmente previsto se debe a que el Tesoro podría encontrar dificultades en sus futuras colocaciones de deuda a corto plazo.
Si vemos comparativamente, durante la última subasta de este tipo se saldó con el peor resultado en cuestión de tipos de interés desde 1997. España se vio obligada a pagar más del 5% en la financiación del cortísimo plazo, a tres y seis meses. Y colocó 3.158 millones de euros, por debajo del máximo. Previamente, el 17 de noviembre, se vendieron obligaciones a 10 años a un tipo de interés del 7%.
Sin embargo, la prima de riesgo, que se moderó ligeramente la semana pasada, ha vuelto a superar el umbral de los 400 puntos básicos este lunes, pese a los acuerdos alcanzados en Europa.
Pese a esto, aún quedan más pruebas que continuarán el jueves, con una emisión de obligaciones de entre 2.500 y 3.500 millones de euros. En concreto, subastará obligaciones con cupón del 4% y vencimiento a 30 de abril de 2020 y dos referencias adicionales: obligaciones con cupón del 3,15% y vencimiento a 31 de enero de 2016 y obligaciones con cupón del 5,50% y vencimiento a 30 de abril de 2021.
