Podemos decir nuevamente que estamos frente a una nueva prueba superada por el Tesoro público que ha colocado 3.750 millones de euros, el máximo previsto, en bonos y obligaciones, aunque a tipos más altos pero esta vez sin tener que situar la rentabilidad por encima del 6%.
En total, la demanda ha vuelto a ser alta y ha superado los 10.200 millones. En concreto, el organismo ha colocado 1.200 millones en bonos del Estado con cupón del 3% y vencimiento a 30 de abril de 2015 a un interés del 5,203%, y 1.400 millones en obligaciones con cupón 3,15% y vencimiento a 31 de enero de 2016 a un interés marginal del 5,28%.
Si vemos las obligaciones a 5 años con cupón del 3,80%, el Tesoro ha colocado 1.150 millones de los 3.761,25 millones solicitados por los inversores a un interés del 5,560% frente al 4,885% de la última emisión realizada el 3 de noviembre.
Es cierto que España ha tenido que pagar unos tipos de interés elevados. Pero, tenemos la buena noticia es que los rendimientos de la subasta de hoy son moderados en comparación con las últimas de letras a tres y seis meses celebradas la semana pasada y en las que España se vio obligada a pagar más de un 5%. También supone un importante alivio en el coste de la financiación en comparación con la última subasta de obligaciones a 10 años, cuya rentabilidad se situó cerca del 7%.
Fue una subasta clave para medir la confianza de los inversores, y la respuesta fue una bajada fuerte en la prima de riesgo española situándose en 376 puntos, desde los 395 del cierre de ayer. Así, la rentabilidad del bono a 10 años se sitúa en el 6,05%, frente al 6,23% de última hora de ayer. Mientras, el bund alemán al mismo plazo paga un 2,29%, frente al 2,28% de ayer.
En este 2011, el Tesoro acudirá a los mercados en otras tres ocasiones. De esta manera, habrá una emisión de letras a 12 y 18 meses el martes 13 y otra de letras a 3 y 6 meses el jueves 20. El organismo cerrará el ejercicio con una de obligaciones el jueves 15 de diciembre.
