Nuevamente el Tesoro de España logra superar una prueba de fuego en emisiones. Pese al desastre financiero desatado por Grecia, país que tomó la decisión de convocar un referéndum sobre el segundo rescate heleno, el Tesoro ha conseguido colocar el máximo previsto en deuda. Sin embargo, el tipo de interés ha sido superior al de la subasta anterior.
Tras la presión desatada en los mercado de deuda soberana la decisión del Gobierno griego de convocar un referéndum, el Tesoro ha vuelto a examinarse. De esta manera, el organismo logró colocar un total de 4.490 millones de euros en bonos, el máximo previsto (estimaban colocar entre 3.500 y 4.500 millones) a un tipo de interés mayor que en la anterior subasta de deuda. Por su parte, la demanda de los inversores ha superado los 7.300 millones.
Si lo vemos de forma segmentada, el Tesoro español ha colocado 2.928 millones en bonos a 5 años, de los 4.731,03 millones demandados, a un tipo de interés medio del 4,848%, por encima del 4,489% de la anterior subasta celebrada el pasado 1 de septiembre.
Asimismo, ha vendido 1.562 millones de euros en bonos con vencimiento a 31 de enero de 2014 con un tipo de interés del 4,27%. En este caso, la demanda ha superado los 2.596 millones de euros.
Por suerte, durante las últimas veces que el Tesoro ha acudido a los mercados ha logrado colocar la cantidad prevista y a tipos más bajos a pesar de las rebajas de calificación que ha sufrido España por parte de las tres agencias de calificación crediticia ante la vulnerabilidad del país.